¿POR QUE HAY CRISIS?..... Por Mellow Yellow

Os paso un articulo de mi amigo Mellow Yellow, saludos.....



A veces, las enseñanzas más valiosas de la vida llegan del modo más insospechado. ¿Recordáis el inicio de mi anterior mail, donde decía que cada hombre, mujer, y niño, con cada una de las acciones o inacciones que cometían eran culpables de la situación actual? Como podéis imaginar, las palabras no son mías. Son de un viejo videojuego, en el que un mago se lamentaba autoculpándose por no evitar la destrucción de un planeta, y su mentor le consolaba de aquella manera.

Esta entradilla es un poco extraña, pero, al fin, ¿cuál no lo es, cuando yo escribo? El hilo nos lleva hacia el siguiente ovillo; ayer me compré un (otro) libro. Es un jodido bestseller, el típico fenómeno literario, supongo que eso me convierte en un freak tan lamentable como el otro millón de personas que lo han comprado. Fui a por el tras ver la película (una producción francesa, nada que ver con la novela negra nórdica, aún no he llegado a ese extremo) porque tenía unos personajes muy interesantes, pero esbozados a brochazos. Además los verdaderos críticos con el film, los únicos que le daban mala nota, eran los que habían leído el libro...

En fin, me acerqué a uno de esos supermercadillos culturetas y bajé el libro de la estantería, lo abrí por la página 3, y la primera frase que leí fue: "Quien siembra deseo, recoge opresión". Bueno, tras leer un par de párrafos más, desembolsé 19,50 y salí por la puerta, a por un café y un pincho, 3,00. Menuda tarde; debería haberme ido a casa, no se puede quedar uno por ahí, siempre acaba gastando pasta a lo tonto.

Quien siembra deseo, recoge opresión.

Peazo de frase.

¿Habéis visto el último anuncio (de prensa) de Audi?

Aparecen un montón de fotografías de puertas de garaje cerradas; inconscientemente se apela al ultracapitalismo, dado que en este estado el único que posee el tipo de vivienda es el burgués verdaderamente acomodado, no el obrero burgués, o, al menos, el obrero que se cree burgués. En cada una de las puertas cerradas aparece parte de un mensaje, no recuerdo exactamente el texto pero dice algo como "solamente cuando se desea algo muy intensamente puede hacerse..." y la última puerta está abierta, y asoma el moro de un audi A nosecuantos.

Nada que ver con la realidad cotidiana, claro. Cada vez que vamos por la autopista en nuestra furgoneta cuasiveinteañera, por la autopista nos adelantan miles de Audis, Mercedes, Golfs y demás indicativos de lamentable status social. Vehículos de 50 a 90 mil euracos, comprados por fontaneros, carpinteros, traficantes, hijos de papá, carniceros, obreros de fábrica, etc. etc. La inmensa mayoría de ellos nuevos, pagados mes a mes, cuota a cuota, a un banco enriquecido a costa de ese deseo estúpido de tener una carcasa metálica que se desplaza a toda hostia y mola un testículo.

¿Y decimos que hay crisis? Pues sí.

Crisis de intelecto.

Un día todo llega; la vida tiende a burlarse de uno, y ese albañil que compra un Mercedes de segunda mano en Alemania por el increíble precio de 40 mil euracos con sólo 70000 km, un día sufre el pequeño percance de que un envidioso vecino le arranca el retrovisor. Y, tan ancho, se planta en el concesionario de la Merche, donde le piden 1000 euros por otro. El albañil se indigna, se enfurece, pero la amable secretaria (una colega mía, este es un caso real) le explica que el automóvil que posee es un vehículo de lujo, y que, el lujo, claro, se paga como tal. El albañil sufre en sus entrañas la suma del cabreo que le produce, en ese instante, existir; dentro lleva un erizo que se revuelve, y sus púas afiladas son la envidia del vecino, que arranca el retrovisor, la crisis de la construcción, que merma sus ingresos y le hace trabajar más horas por menos, la crisis bancaria, la que le concedió el crédito del coche y la casa que no puede pagar, y la energética, que hace que le gasolina que consume semejante trasto en el camino al concesionario a que te lo arreglen te salga una pasta. Por ello, tras varias explosiones culpando a todo el mundo: Zapatoy, Rajero, a los moros, a los bancos, a la puta patronal, a los sindicatos, a la sociedad, maricones hijos de puta, que me estáis jodiendo la vida y yo soy sólo un puto currito, ¿quemásqueréis, eh, quemás? y cagarse en la puta madre del inventor del primer Mercedes, pide cinta aislante, y se va en su automóvil de lujo con el retrovisor pegoteado. Sólo olvido culpar a una persona: a sí mismo.

Real como la vida misma.

Yo también anduve una temporada con los dos retrovisores pegados con cinta aislante. Me los arrancaron en las fiestas del pueblo unos jodidos borrachuzos. Cuánto bien ha hecho el botellón al gremio de los carroceros y al mercado de piezas de repuesto. Pero mi coche era un Megane de los viejos, de segunda mano, con algún que otro rayón. El efecto no es el mismo que en un Merche.

Está claro que la vida es una marea que nos arrastra y en la que gran parte de los casos no tenemos muchas opciones; no al menos gran parte de la humanidad. Esta claro que no es lo mismo leer en el periódico "La crisis provoca un descenso en el poder adquisitivo de los españoles" que "Nuevo atentado en el centro de Bagdag". Empezamos a no tener la necesaria percepción de lo que es realmente una desgracia. Pero, en el mundo que al parecer cuenta, que es el primero, el nuestro, los imbéciles han sido, en gran parte de los casos, necesarios cómplices de los hechos que les han convertido en parias. Analizar la cuestión exclusivamente desde el punto de vista de la víctima es ser parcial; si uno ve "Capitalismo, una historia de amor", siente lástima cuando en la pantalla aparecen los idiotas desalojados de sus casas por los bancos; pero yo, no puedo menos que preguntarme qué era lo que ese idiota desalojado deseaba tan intensamente como para ir al banco a pedir un crédito y arriesgar su casa. Al final, todos somos culpables, esclavos de las chorradas que queremos comprar financiando a 36 cómodos plazos, sembramos deseo, recogemos opresión. Culpar a un político es tan inteligente como culpar al contrario de ese político.

Otra de las enseñanzas de la vida que me llegó de un modo sorprendente fue así: estaba viendo un concierto de Xoel López, con montones de artistas invitados, el bolo duraba 3 horas, el jodido, y en una de estas apareció un señor invitado gordísimo (lo cual es importante, porque si no hubiera estado tan obeso no hubiera podido ver claramente lo que ponía en su camiseta) en cuyo amplio y grasoso pecho estaba serigrafiado, blanco sobre negro, la siguiente frase:

NO TE ESCUCHAN. VOTA POR NINGUNO.

Sabiduría de camiseta sudada.

Por cierto, Xoel en la puta vida me va a volver a pillar en uno de sus conciertos. O igual sí, cambio de opinión con regularidad.

Empiezo a desviarme. Al grano de nuevo.

En este caldo, con tan poca verdurita y tanto tocino, no es de extrañar que sólo puedan alimentarse a gusto los que tienen el estómago más resistente. Con ello quiero decir que esto, esta mierda de crisis de la que nos quejamos pero de un modo abstracto, porque muchísimos de nosotros ni siquiera la sentimos en nuestras carnes; porque seguimos durmiendo bajo techo, seguimos llenando el plato 3 veces al día, si no mas, y la única consecuencia real es que en vez de ir de vacaciones a Vietnam iremos a Benidorm, que es mucho más peligroso y tóxico, la provocaron ellos, que son aún peores que nosotros mismos, sí, pero con nuestra inestimable ayuda.

Para terminar:

¿Sabéis por qué los bancos ganan tanto dinero?

Porque saben cuán ruines son sus clientes.

Porque saben cómo sois.

Porque saben cómo soy.

Comentarios

  1. Oye Melow, muy bueno, me ha gustado toda "Esta entradilla es un poco extraña". Miscelánica y estupenda a la vez. No suelo zamparme los textos de cierto tamaño, pero esta vez sí. Y 'quería más'.

    ¡Hala! a por otra sin tardanza!

    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Excepcional, ni nadie trabaja por ti, que nadie decida por ti.

    ResponderEliminar
  3. Buen Post Mellow. Un post cargado de varios temas pero todos conexos entre sí.

    MENTALISTA, me puedes facilitar un correo de contacto?

    ResponderEliminar
  4. Victor, Mellow es un crack, una mente crítica y atormentada.
    mocordorsong@gmail.com

    ResponderEliminar
  5. Mellow tio, eres un crack.

    Tendríamos que alzar las voces para que nos escuchen.

    ResponderEliminar
  6. Buen trabajo.
    Yo solamente puntualizar que la crisis existe para quien en verdad la sufre.

    ResponderEliminar
  7. Helio,
    por supuesto la crisis a unos les afecta en la compra de un yate y a otros en la compra de un kilo de alubias.
    Un saludo

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares